TIC y Educar Ciudadanos: La cultura participativa en la era digital

domingo, 15 de julio de 2012 0 comentarios

1. Kony 2012: características de un video viral.

El deseo de compartir, de sentir empatía yace en todo ser humano, las emociones en esta naciente -y popular-  era digital se transforman en emociones colectivas con solo un click, a esta premisa puede acudir el video de Kony 2012 para lograr el éxito. 

En los primeros minutos no imaginas el contenido central del video, lo encuentras llamativo e inspirador, podría ser la vida de cualquiera de los 7mil millones de habitantes del globo, del niño, de la madre, de la mujer, del padre; al pasar de los minutos, reconoces que no es un video mas, al centrar su vista en África Central, en Uganda especialmente, el tono de denuncia de una problemática, aparentemente mas profunda, aparece en escena y tomara buena parte de los 29 minutos de duración, para dar un nuevo salto casi al final, donde el compromiso del espectador se pone a prueba, son solo unos dólares o unos cuantos click para transformar el mundo, quien no quisiera sumarse a tan maravillosa empresa.

Kony 2012 posee un estilo narrativo que atrapará al espectador y lo soltara al completarse la línea roja de la pantalla de YouTube, lo dejara pensando y lo remitirá a las redes sociales para conocer mas sobre Joseph Kony o sobre Invisible Children. La combinación de la imagen, la música, las voces involucradas en el video lo hacen merecedor de las millones de visitas que registro en tan poco tiempo, pero predomina la voz del narrador, quien se pone a si mismo -y a su organización- en el papel de mesías al hacer promesas del tamaño de “Lo vamos a detener”. 

La alusión a lo que la humanidad siempre preservará, la niñez, considerada como el futuro, no debería estar en medio de un conflicto con las características del que se describe en el video, no debería temer dormir en su casa o caminar por sus campos, el video alude al instinto natural de preservación de la especie, pero también a los ideales democráticos enarbolados por los gobiernos de turno en Estados unidos, la libertad de intervenir en nombre de la libertad.

Los personajes que involucra el video, y sus testimonios, son también parte de la receta para el éxito, resultan ser figuras que generan empatía, el niño norteamericano -hijo del narrador-  que reconoce la aparente diferencia entre el bien y el mal, el niño africano que llora la perdida de su hermano y después, las imágenes de personas agrupadas realizando tareas comunes transforman la empatía, invitan a ser uno de los millones que levantaran su voz de protesta frente a esta situación, si a esta formula le súmanos 20 iconos culturales de la actualidad, 12 figuras del ámbito político  y la posibilidad de que el espectador -ahora militante-  pueda establecer comunicación con estas 32 figuras, el éxito ya es una realidad.  El video invoca también la necesidad de participar, denunciar, reclamar, y pertenecer para el espectador.



2. Otras fuentes hablan: el caso de Kony es sometido a crítica.

Kony 2012 es sin lugar a dudas una de las revelaciones en la red, un video viral, por su rápida expansión, por su singular formula audiovisual, pero también es objeto de fuertes criticas, algunas de ellas referenciadas por medios digitales a lo largo del globo.

La revista Enter (Colombia) en su publicación en la red: “KONY 2012, ¿denuncia real, o negocio basado en la manipulación?” del 13 de marzo del 2012 toca algunos de los puntos en los que se centra la critica a Kony 2012.  En primer lugar esta la simplificación de la problemática, pues reduce el conflicto en Uganda -de mas de 30 años y con mas actores involucrados- a un solo individuo, al maniqueo enfrentamiento entre el bien y el mal.  En segundo lugar presenta un conflicto descontextualizado, pues omite información valiosa de la actualidad del conflicto y de la actuación del LRA en territorio Ugandés, distintas organizaciones aseguran que Kony no esta en Uganda hace mas de 6 años, y que sus acciones de reclutamiento infantil no son tan intensas como en los periodo mas fuertes del conflicto. Dentro de los consultados por esta publicación aseguran que es una iniciativa para “atraer incautos” si a ellos se suma el trasfondo económico de donaciones y compra de productos publicitarios.

El diario el País (España) en su publicación digital del 14 de marzo de 2012, titulada “El otro lado de la historia de Joseph Kony: la violencia del Ejército de Uganda” presenta puntos adicionales frente a esta viral publicación, y la simplificación que realiza de una problemática casi de carácter continental, ¿es solo Kony el responsable de las violaciones a los derechos humanos en Uganda? ¿Qué hay del ejercito ugandés? Unas fuerzas armadas que no se caracterizan por su rectitud sino que por el contrario son tachadas de corrupción y de utilizar las mismas estrategias de reclutamiento infantil del “malo” de kony.

Por ultimo la ONG Global Voices en su publicación “Uganda: ¿Puede un vídeo viral realmente detener a Kony?” presenta la visión de personalidades del país africano que critican duramente la visión del conflicto presentada por Invisible Children pues desconoce las acciones de las comunidades del norte del país y la actualidad del conflicto, desconoce también otros actores como el papel de los entes gubernamentales, especialmente el presidente de Uganda -quien lleva mas de 30 años en el poder- . Pero no son estas las únicas críticas a la iniciativa, la recolección de fondos y la destinación de las millonarias ventas de productos y donaciones, que realmente no se ven reflejadas en acciones en el terreno, sino en el sostenimiento de la organización y en la producción de videos.

Para concluir la conmoción generada por Kony 2012, nos muestra el poder de la imagen y las palabras, el verdadero problema es el objetivo del creador, y sus limites éticos, ¿vale todo a la hora de promocionar una idea?, ¿es valido desconocer la totalidad de un proceso histórico, por convencer al incauto y sensible televidente?, ¿Cualquier causa por justa que parezca justifica la intervención de otros, cuando esos otros son en parte responsables del problema?, ¿esta el dinero por encima de la ética del activista contemporáneo?... preguntas que debe estudiar con cuidado el ciudadano digital, que tiene la posibilidad de ver varios puntos de vista, es la decisión del espectador, si actúa sin razón, o verifica la credibilidad de las iniciativas virales en la red.



3. Reflexión final: desafió de la educación ciudadana 

Con las criticas a Kony 2012 y a la organización Invisible Children mas que el debate de lo que esconde o de los propósitos económicos, esta el papel del ciudadano digital frente a estas iniciativas.  La ética del “prosumer” resulta fundamental en la promoción del activismo sobre causas ciudadanas, pues no todo debe ser valido para el productor y el consumidor en la red, en cuanto al productor tiene la obligación de informarse bien, de mostrar a su espectador panoramas mas completos sobre su idea o su iniciativa, el consumidor tiene la  posibilidad de analizar diferentes puntos de vista, de contrastar información, esta debería constituir una obligación para no pasar por incauto o bolsillo útil a una causa.

Estas iniciativas contribuyen a la formación ciudadana, muy seguramente si nos quedamos solo con una versión de la historia, no será la ciudadanía mas participativa y critica, será tal vez la que mas  sume (clics y dólares) a estas iniciativas, será una ciudadanía crédula de la honestidad y transparencia de  quien produce contenidos, sensible a la imagen y las palabras bien elaboradas. 

El verdadero reto de la escuela en tiempos de internet es formar ciudadanos críticos, que siempre buscan mas allá, que contrastan la información que reciben, que son sensibles claro, pero que no comen entero, que digieren, que seleccionan con criterio y toman decisiones orientados por la razón.  La escuela tal vez se queda corta en la tarea de formar ciudadanos digitalmente competentes, no solo en el manejo de dispositivos, sino  en el manejo de la información disponible en estos medios, la resistencia a sido la bandera que el sistema escolar decidió -en muchos casos- ondear con relación a nuevas tecnologías, porque cree que será remplazada, bandera a todas luces errada, pues la escuela debe ser protagonista, al brindar la formación  necesaria para que el ciudadano construya, decida y participe.

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